Cuando el hambre entra por la puerta
Reflexionando en 2º de bachillerato sobre la felicidad, acompañados por Aristóteles, recuerdo esta frase: cuando el hambre entra por la puerta, el amor sale por la ventana. ¿Qué relación hay entre la felicidad y el dinero? ¿Se afectan mutuamente o son independientes? ¿Podemos ser felices en la pobreza? La frase sugiere que no. ¿Está en lo cierto? Y tener mucho dinero ¿puede hacer más dificil ser feliz?
Mucha gente suele confundir felicidad con el hecho de tener muchas pertenencias o poder vivir bien, en cierto modo eso te produce felicidad pero si no tienes con quien compartir esas cosas nunca podrás disfrutarlas del todo. Haciendo referencia a lo que acabo de decir, pienso que si se afectan mutuamente, exactamente por mi pensamiento mostrado anteriormente. Se puede ser feliz en la pobreza si tienes personas que te amen y estén contigo, aunque creo que si eres demasiado pobre no podrás tener una buena vida y eso afectará a tu felicidad. Puede que tenga parte de razón, el hambre es una necesidad básica del ser humano y claramente más importante que el amor en sentido biológico, pero sin amor también puedes llegar a morir con el tiempo puede que de tristeza. Para finalizar respondiendo a la última pregunta, el dinero te da comodidades pero en exceso te puede provocar muchos problemas como la avaricia o personas que quieren quedarse con lo que tienes.
ResponderEliminarEl comentario anterior es de Rocío Cabrero, de 1ºD
EliminarPatricia García Bordes 2º D Bachillerato. Para Aristóteles, la felicidad (eudaimonia) es el fin último que persigue el ser humano, su principal objetivo, aunque es difícil de explicar ya que cada uno siente la felicidad de distinta manera. Para unos esta representa la salud, para otros la familia... y hay muchos que piensan que la felicidad se alcanza a través del dinero.
ResponderEliminarEs difícil juzgar si hay una relación entre la felicidad y el dinero. Si preguntamos a la gente, la mayoría responderá que sí. Pero como en muchos aspectos de la vida, esta afirmación hay que verla desde distintos puntos de vista o situaciones. Para aquellas personas que carecen de dinero para cubrir sus necesidades más básicas (comer, un techo bajo el que vivir...) es lo más importante ya que pasan por situaciones tan injustas y tan penosas que con tan solo un poco de dinero para lograr sobrevivir, podrían sentir que han alcanzado la felicidad. Pero tan solo en casos de pobreza extrema podríamos asegurar que existe una estrecha relación. En el resto de los casos creo que hay una cierta conexión entre ellos, que la una depende del otro, pero que no son inseparables.
Vivimos en una sociedad en la que "casi" todo se compra con dinero. Pero en ese "casi" es en donde radica la felicidad. No necesitamos el dinero para relacionarnos con los demás, para amar a nuestras familias y amigos, para ser libres, para ayudar a los demás... Hay quien dice que las personas pobres no pueden ser felices pero se equivocan porque la felicidad se encuentra en el interior de uno mismo, en superarse, en aceptar lo que uno tiene, en compartir... Miles de personas pobres disfrutan más y son más felices que otros que todo lo tienen: ya puedes ser millonario o poseer una multinacional, que si no tienes con quien compartirlo no llegarás nunca a ser feliz.
En contraposición a la frase que se ha planteado ("cuando el hambre entra por la puerta, el amor sale por la ventana"), yo aportaría aquella que dice: "el dinero ayuda pero no da la felicidad" o aquella otra que afirma "no es más rico el que más tiene sino el que menos necesita".
Como bien trataba Aristóteles en su obra, el fin de la vida del ser humano es encontrar la felicidad pero, ¿qué es la felicidad? Para algunos puede ser la estabilidad económica, la riqueza, la posesión de gran cantidad de bienes, para otros el amor, el cariño de otras personas, encontrar alguien con quien compartir tu vida o conseguir sus objetivos personales como puede ser crecer como persona, implicarse al máximo en su religión, etc. Todos ellos dependen de cada persona y opinión pero desgraciadamente ninguno se salva de la misma limitación, el dinero. Y es que es un hecho, sin dinero es casi imposible realizar las actividades más básicas de nuestra vida como puede ser alimentarnos, mantener la higiene o cuidar nuestra salud, y para ninguna persona es un gusto estar en una situación en la que no esté asegurado el saber si se va a poder o no comer al día siguiente. No por ello se justifica que la felicidad se resuma en el dinero porque como bien se sabe, nada es bueno en exceso, como ocurre en este caso, ya que al igual que te puede facilitar a conseguir todo aquello que ansíes, te puede hacer la persona más infeliz creando un inconformismo sin límite alguno.
ResponderEliminarEn conclusión la felicidad se encuentra en las motivaciones de cada uno y el dinero es necesario para el desarrollo de nuestra vida y un factor que nos puede facilitar la obtención de aquello que nos aliente, mas también puede ser el causante de la imposibilidad de nunca alcanzar nuestra plena eudaimonía.
Nayra Melero, 2º Bachillerato C
Es algo inquietante pensar que lo mismo que nos permite conseguir muchas metas, el dinero, puede llegar a convertirse en una meta en sí misma, "sin límite alguno", como dices, y por lo tanto condenándonos a la insatisfacción, porque nunca se tiene lo suficiente.
ResponderEliminarVivimos en un mundo materialista donde creemos que el dinero, y las posesiones en general, nos llevaran a una felicidad, que realmente no es verdadera, ya que no son las principales cosas que hacen feliz a un ser humano. Es cierto, que con el dinero podemos comprar cosas que nos hacen felices, es decir, para conseguir una felicidad temporal, sin embargo, es imposible comprar una felicidad eterna.
ResponderEliminarAl final, la única relación que encuentro entre felicidad y dinero, es compartir tus posesiones con los más necesitados, y de esta forma ser feliz ayudando al resto y que la sonsrisa de otros, provoque la tuya. Como dice el dicho; compartir es vivir.
Y en cuanto a la cuestión de si se puede ser feliz en la pobreza, a mi parecer, los que menos pertenencias tienen son los más felices, ya que valoran más la vida y consiguen ver las cosas más bonitas e importantes de esta. Lucía García 1º B
Nerea Gómez-Escalonilla ,1bach D
ResponderEliminarPienso que muchas veces relacionamos lo material con la felicidad que nos puede proporcionar esas cosas, pero sin darnos cuenta que no nos ofrece toda la felicidad. Se ofrecen mutuamente ya que si no tuviéramos un mínimo de dinero no podríamos tener los bienes necesarios para nuestro propio desarrollo para poder sobrevivir, ya que si eres pobre o tienes escasez económica no tendrías esa felicidad que una persona que está bien económicamente y puede satisfacer sus necesidades tanto básicas como generales. Pero el dinero no nos puede ofrecer toda la felicidad ya que para ser completamente feliz necesitamos bienes inmateriales, por ejemplo el cariño y el amor que te pueden ofrecer la gente de tu entorno ya que sin ello no seriamos felices aunque estuviéramos bien económicamente. Por ello al estar pobre no eres completamente feliz ya que te falta una parte para tu desarrollo como persona. Al tener demasiado dinero creo que no es bueno ya que muchas personas se pueden aprovechar de ello sin darte cuenta y te vuelves ambicioso
La sociedad se encuentra condicionada por el dinero, todas las personas tenemos el deseo así como la necesidad de poseer dinero con el objetivo de poder cubrir nuestras necesidades. En un gran número de ocasiones, las personas no tienen el suficiente poder económico para cubrir las necesidades más primarias, como la alimentación, la ropa, la vivienda etc… Según la frase, estas circunstancias conllevan a la pobreza y de esta forma al amor, relacionando que el amor se da cuando hay dinero y poder económico.
ResponderEliminarDando mi opinión acerca de esta frase, he de decir, que las personas tendemos a juntar y a relacionar al completo los bienes materiales con aquellos cosas inteligibles. Una persona puede no tener dinero y está pasando por malas circunstancias económicas puede estar al mismo tiempo rodeada de personas que la quieren y la ayudan, esto es debido a que el amor que existe entre esas personas es una amor sincero y verdadero, no por interés material.
Por otro lado, existe una parte de la sociedad que se acerca a las personas con el objetivo de obtener bienes económicos y materiales, es decir, buscando de ella intereses como dinero, cenas etc... y que de esta forma, en el momento en el que la persona pierde todo el poder económico, las personas se alejan de ella ya que no puede
cubrir sus necesidades.
Es por tanto, que en cierto modo la frase es cierta siempre y cuando se refiere a esas personas las cuales solo buscan un interés material de otras, sin embargo, siempre existen personas las cuales quieren a otras y las dan todo su apoyo independientemente de su poder adquisitivo. Según mi punto de vista, no defiendo el contenido de la frase, ya que si el amor es un amor sincero la persona querrá a la otra independientemente de su poder económico y sus circunstancias personales.
ResponderEliminarCarla Corredor Álvarez- 1° bachillerato A
Creo que el dinero no compra la felicidad, pero sí ayuda, es decir, cuando tienes dinero de sobra te puedes centrar más en preocuparte por ciertos aspectos, como centrarte más en tí mismo, poder tener más experiencias, etc. los cuales si no tuvieses dinero no estarías tan pendiente, porque centrarías tu atención en sobrevivir. Sin embargo, pienso que todo en la vida es cuestión de actitud, y que si a pesar de lo que te pueda pasar tienes a gente que te apoye, tienes una buena actitud y te tomas las cosas de una manera positiva, vas a ser más feliz. Y aun que tengas mucho dinero, si no eres positivo vas a ser un infeliz. Por eso el dinero ayuda, pero en absoluto té da la lfelicidad. La felicidad se la da uno mismo.
Cristina Serrano - 1° Bachillerato A
ResponderEliminarLas personas actualmente son muy materialistas. Desde mi punto de vista creo que hay una gran relación entre la felicidad y el dinero ya que hoy en día si no puedes pagarte cosas imprescindibles como un techo o comida para alimentarte, pienso que la inmensa mayoría de nosotros no podríamos llegar a ser completamente felices. Por desgracia hay muchas personas viviendo en la pobreza y a la vez disfrutando su vida al máximo; pero opino que el dinero en muchos casos si da la felicidad o te ayuda a serlo un poco más. Al igual en el caso contrario hay muchas personas que son ricas y tienen todo lo que han querido desde siempre, pero esto no les llena lo suficiente como para ser felices al cien por cien y lo que realmente les hace falta son cosas no materiales como el cariño.
Clara Esteban, 1º Bachillerato A
ResponderEliminarLa felicidad no se define, se experimenta. Para ser feliz todos necesitamos cierto nivel de bienestar físico y psicológico. Hay que vivir el momento e intentar ser la mejor versión de nosotros mismos.
El dinero es un medio de pago que nos permite comprar bienes y servicios a lo largo de nuestra vida.
Siempre hemos escuchado el dicho “el dinero no da la felicidad”, pero ayuda. Hay estudios que demuestran que la mayoría de las personas muy ricas no son felices. Esto sucede porque tienen acceso a todo y tienden a no valorar las cosas. Además se tiene la duda si las personas que las rodean están por interés. También hemos escuchado en alguna ocasión que personas que han sido premiadas en la lotería, pasados unos años son más pobres de lo que eran o están arruinadas. Esto puede ser debido a la mala gestión del dinero. En el otro extremo tenemos a las personas más vulnerables o con pocos recursos. En este caso, pienso que no pueden llegar a experimentar una felicidad plena debido a la cantidad de problemas que tienen. Creo que tiene que haber un equilibrio entre la felicidad y el dinero porque se afectan mutuamente. Ya que no se puede ser feliz en todo momento y a todas horas, quiero pensar que todo el mundo haya podido ser feliz en alguna ocasión.
Sheila Proaño 2ºC
ResponderEliminarDesde mi punto de vista, considero que la felicidad y el dinero no es algo que se ``lleven de la mano´´ porque para tener felicidad no hace falta tener una gran cantidad de dinero. Lo único realmente importante es saber vivir el momento con las personas que queremos.
El dinero lo único que hace es que las personas compitan o se tengan envidia y la gente se obsesione con ese medio de pago que sinceramente lo tenemos en un ``pedestal´´ cuando realmente no tiene que ser así. Lo que hace falta es conservar un poco de dinero para vivir acomodadamente bien y si queremos progresar podemos ahorrar pequeñas cantidades de dinero hasta conseguirlo.
Por otro lado, si nos centramos en la felicidad su significado es ir progresando y sentirme completa alrededor de las personas que quiero sin pensar en nada más.
En definitiva, el dinero y la felicidad no se complementan si no que son dos conceptos totalmente diferentes. La felicidad para mí es un estado emocional que no la solemos tener todo el tiempo pero que cuando la conservamos es la mejor sensación del mundo. No todas las personas la vivimos de la misma manera pero quiero creer que en algún momento de nuestra vida la habremos conservado todo el mundo.
Lucía Montealegre - 2BTO D.
ResponderEliminarEl dinero y la felicidad están claramente relacionados, pero esto no quiere decir que el dinero sea proporcional a la felicidad o que provoque esta. La felicidad para mí reside en lo que nos rodea, los amigos, la familia y los momentos en lugares que sentimos hogar. Pero el dinero puede ayudar a impulsar esta felicidad que ya reside en nosotros independientemente de nuestra nómina. El dinero nos libera de ciertas preocupaciones y nos ayuda a cumplir sueños y ayudar a otros a cumplirlos, es más fácil ser feliz con más dinero y esto es una realidad. No es necesario ser multimillonario, pero el dinero justo para no tener que preocuparte por la educación de tus hijos, por su salud o por la alimentación creo que es necesario para poder llegar a plantearse la pregunta de ¿soy feliz?. Se puede ser feliz en la pobreza e infeliz siendo millonario, sí. Pero que el dinero ayuda a la felicidad es indudable.