¿Los alumnos son esclavos?
Después de contar el mito de la caverna de Platón en las clases de 1º de bachillerato hemos discutido si el colegio se parece a la caverna. La mayoría de los alumnos piensan que sí e incluso que ellos son los esclavos. Pues bien, siendo alumno ¿te sientes esclavo al estudiar el bachillerato? Si es así ¿cuáles son tus cadenas? Y por último ¿cómo puedes ser más libre?
Algunos alumnos comentan que, aunque el bachillerato no es enseñanza obligatoria, hay una presión social que les fuerza a estudiarlo, siendo por lo tanto esclavos. Pero ¿sólo hay un modo de responder a esa presión? ¿no puede ser la educación la que precisamente nos haga más libres? ¿No piensas que con menos educación, menos libertad?
Por si no recuerdas el mito, aquí lo tienes en video:
ResponderEliminarLucía Domínguez 2 Bachillerato D
Mi opinión sobre este tema está construida tras reflexionar durante largo tiempo y tomar en cuenta mi larga experiencia en la educación española.
Por un lado, durante los quince años de continuo estudio en algunos momentos me he sentido obligada a continuar con ellos aunque aparentemente ni me hacía feliz ni me resultaba útil en algunos aspectos. Aún así continué hasta acabar los obligatorios y seguí con mi rumbo hacia bachillerato, donde me encuentro cursando el último año. Por ello gracias a mi experiencia he de decir que hay momentos que aparentemente pareces un esclavo del sistema educativo y de los objetivos que la sociedad te marca sin consultar previamente.
Explicado esto, sí que puedo afirmar que somos en algunos momentos esclavos de los estudios entendidos como un conjunto de materias que se cursan para conseguir un título, pero no de la educación, ya que ésta no sólo se encuentra en el instituto, ni en los grandes libros de Historia o Lengua Castellana, se encuentra en el más recóndito aspecto que engloba a nuestra vida. La educación se halla en la capacidad de desarrollar tu propia inteligencia, códigos morales y afectivos…
Estas razones y la clara diferencia que suponen es lo que hace reforzar mi opinión de esclavitud respecto a los estudios pero no de la educación como tal.
La educación y el saber propio de la misma es lo que nos hace libres y nos libera de las cadenas, ya que si en algún punto de tu vida la sociedad te presiona para cursar unos estudios concretos aún queriendo seguir tu propio rumbo, la educación recibida y aprendida te ayudará hacerles frente y saber que lo único que importa es tu propia realización y felicidad.
Me parece interesante la diferencia que encuentras entre los estudios y la educación. Los primeros los relacionas con la esclavitud, la segunda la relacionas con la liberación.
EliminarYa que trabajo en educación, no puedo dejar de preguntarme algo: ¿cómo se puede hace que los estudios sean liberadores?
Hoy por hoy la educación ha conseguido tener la importancia que merece, siendo impartida a casi toda la población, algo de lo que cien años atrás sólo gozaban los más afortunados. Sin embargo he de decir que desgraciadamente no se imparte de la manera que se debería, ya que nuestro sistema educativo se basa en la memorización en vez de en el aprendizaje del alumno, convirtiéndola en algo pesado, agotador, martirizante, o incluso capaz de esclavizar tanto al profesorado como a los pupilos de estos, debido a que no se les da la libertad a los maestros de impartir su asignatura como ellos de verdad querrían y haciendo que los alumnos engullan toda la teoría sin tan siquiera entender.
ResponderEliminarEl gusto de aprender, investigar o ampliar conocimientos debería ser por lo que la gente estudie o forme parte de la educación, sin embargo la verdadera razón es la necesidad de encontrar un trabajo para poder construir el futuro que cada uno ansíe, consiguiendo así la felicidad. Es por ello que se podría llegar a la cuestión de si lo que nos esclaviza es la educación o la propia felicidad por la necesidad de obtenerla.
Nayra melero
2º Bachillerato C
Laura Rodrigo – 2 Bachillerato D
ResponderEliminarEl ver el mito de la caverna me ha hecho pensar o preguntarme por algunas cuestiones, aunque me he centrado en reflexionar en las preguntas planteadas en el tema: si la presión social, el entorno (familia, amigos) me dirigió a estudiar bachiller o quizás podría haber buscado otras posibilidades para llegar a ser lo que quiero. En ocasiones, en charlas nos han hablado de “esas otras posibilidades”, pero yo, como los esclavos que miraban para una sola dirección, ni siquiera me las planteé. Creo que todos somos esclavos del entorno en el que nos movemos y muchas de las decisiones que tomo no son reflexionadas, son simplemente cómodas.
Mis abuelos me cuentan, que en su época solo unas pocas personas, las más privilegiadas, podían acceder a los estudios, no había la posibilidad de tener la información que tenemos ahora; ellos no podían elegir tanto como nosotros. Hoy todos tenemos acceso a la enseñanza. Cuanta más información, tendremos mayor conocimiento de la realidad y tendremos más opciones de elegir, de valorar las opciones que tenemos. La educación se aprende en el colegio/instituto, pero tan importante es la que aprendemos en la familia, en la calle, con los amigos, con cada una de las experiencias que pasamos, etc…
Pero, tal como vivo yo el instituto, en algunos momentos sí lo considero una caverna, ya que lo único que parece importante es la nota, sacar el título, cada vez con más presión. En muchas ocasiones estudias la materia para aprobar, sin que dé tiempo a pensar en ella, sin disfrutar de la asignatura aunque te guste.
A mi juicio no me considero esclava al estudiar bachillerato ya que es una enseñanza no obligatoria y en mi caso he sido yo la que ha elegido estudiarlo porque pienso que es lo mejor para mi futuro. Mis padres no influyeron en la decisión que tomé. Llegué a pensar estudiar el bachillerato de artes escénicas en vez del de humanidades pero mi familia me dijo que era mejor que estudiara el de humanidades ya que me abriría más puertas hacia el futuro.
ResponderEliminarEn el pasado sí que me he considerado esclava del sistema educativo al estudiar asignaturas que no me gustaban (matemáticas, física, biología…) y me preguntaba por qué tenía yo que estudiar eso si a mi no me iba a servir para nada respecto a lo que quería dedicarme de mayor. Pero esas asignaturas las tenía que estudiar por mucho que las aborreciera, aquellas asignaturas hacían que me sintiera verdaderamente mal, por mucho que estudiaba las suspendía, me sentía completamente una esclava y cuando acabé secundaria, pude elegir mi camino y conseguí sentirme libre al quitarme tal peso de encima.
Además siento que tengo ciertas cadenas como por ejemplo la presión de aprobar todas las asignaturas y tener buenas calificaciones para así poder sentirme feliz conmigo misma y que mis padres se sientan orgullosos de mi.
En respuesta a la pregunta: ¿cómo puedes ser más libre? Considero que hay que aprovechar la vida al máximo, tomar las decisiones con las que más a gusto te sientas y que salga a la luz la verdadera versión de ti. Creo que para ser más libres deberíamos dejarnos de influenciar por lo que nos digan los demás. Para conseguir ser más libre hay que comenzar a tomar medidas activas para vivir la vida que quieres vivir y de la forma en la que deseas vivirla.
Respecto a la educación, puedes ser más libre si eres tú quien decide que quiere hacer con su vida después de la enseñanza obligatoria, puedes elegir que modalidad de bachillerato quieres cursar, que ciclo formativo hacer o bien ponerte a trabajar.
Nerea Gómez-Escalonilla 1bachD
ResponderEliminarMi opinión es que yo no me siento esclava por una parte, ya que esta decisión tras varios cursos de estudio he decidido hacer bachillerato por mi cuenta sin haber sido obligada ,buscando una salida para mi futuro . Por otra parte pienso que nosotros los alumnos en algunos aspectos del instituto nos sentimos muy presionados en la exigencia de todo el trabajo que conllevan los estudios y nos gustaría poder tener tiempo para nuestro desarrollo personal como en el ámbito social y realizar algún hobbie en el que nos sentamos a gusto.
Pienso que la educación es bastante importante para nuestro desarrollo intelectual pero que no se debería de obligar a nadie y menos para que se sienta presionado por la sociedad que le rodea. Ya que si esa persona si se siente esclava, va a ser un suplicio y se va a sentir mal al saber que no está cómodo en el entorno de la enseñanza.
Como comentamos en clase, en mi opinión si somos esclavos, ya que la gran mayoría de veces no estamos cómodos o a gusto con lo que estamos haciendo. Muchos de nosotros han elegido bachillerato por decisión de sus padres, por presión social o por desinformación de otras opciones. En mi caso personal no es por ninguna de estas,pero aun así me siento esclavo. Aunque esto lo haga por decisión propia, yo lo que he decidido es la carrera que quiero estudiar y bachillerato es un camino que debo superar para llegar a eso objetivo, aun así preferiría no hacer ese camino, pero no queda mas remedio ya que es necesario para tener una base con la que trabajar mas tarde en la universidad.
ResponderEliminarUna manera de hacer ese camino mas liberador es una educación mas personal y enfocada a lo que tú quieras hacer, es decir, tu supuesta base de cultura general la has obtenido en la ESO y bachillerato está supuestamente mas focalizado en tus futuros estudios, aun así yo solo doy una asignatura que este relacionada con lo que quiero estudiar, esto hace que me sienta obligado a estar dos años de mi vida estudiando algo o que no me gusta o que no me interesa, por tanto me siento esclavo.
También la manera en la que esta ideado nuestro sistema educativo es una manera de esclavitud, es decir, tu te aprendes la lección para el examen, la escribes y ya no vuelves a tocarla, y por tanto se te olvida. Esto no te motiva a aprender ni a entender lo que estudias, solo se evalúa la capacidad de memorización, y esto en mi caso personal es otra cadena que me ata y no me deja disfrutar del aprendizaje.
David Mantecón
1ºBachillerato B
La relación entre el mito de la caverna y el colegio no es tan disparatada. En mi opinión, la clase es similar a una caverna para los alumnos, en la que estos deben permanecer sentados y callados durante seis horas al día. Todos mirando hacia el mismo sitio, concretamente una pizarra, en la que se proyecta o se escribe la información que los alumnos deben aprender.
ResponderEliminarComo alumna de segundo de bachillerato puedo considerarme esclava al estar “obligada” a cursar bachillerato y más tarde la universidad, siendo un convencionalismo social generalmente aceptado. Las cadenas somos nosotros mismos intentando agradar a nuestra familia o amigos centrando nuestra educación únicamente a los estudios. Podríamos lograr ser más libres si nos fijásemos en nuestros intereses y no en contentar al resto, haciendo lo que realmente nos gusta sin importar el grado de dificultad que tenga. Por ejemplo, si te gusta trabajar, ponerte a trabajar, si te gusta un grado medio, estudiarlo, etc.
Yo pienso que de esta presión que se nos ha impuesto podemos deshacernos únicamente con valentía y decisión para poder elegir sin miedo a las opiniones que, como he mencionado antes, normalmente son de tu propia familia.
La educación es un elemento muy importante para nuestra libertad ya que con ella tenemos conocimientos que nos permiten decidir en base a lo que consideramos bueno y rechazar aquello que nos perjudique. Sin educación somos ignorantes, esto nos lleva a una menor libertad por una menor capacidad de elección. Siendo ignorantes, y por tanto menos libres, tendremos más presión de hacer lo que la sociedad nos impone.
Eva Espinel, 2º bachillerato D
Sofía Irene de Antonio – 1º Bach B
ResponderEliminarRespecto a la cuestión de si somos esclavos dentro del colegio o no, creo que depende mucho de la situación personal de la persona y el nivel educativo en el que esté. Pero, en mi caso personal, yo me considero parcialmente esclava en el colegio ya que, por un lado es verdad que yo he elegido libremente estudiar bachillerato para poder acceder a la carrera y después al trabajo que deseo; pero por otro lado, me siento obligada a cursar asignaturas que no me interesan o que ni siquiera tienen relación con la rama que he escogido. Dejando aparte la elección de seguir con la educación, me siento esclava de la forma en la que se imparte, es decir, de tener que estar sentada y callada 5 días a la semana durante 6 horas al día delante de una pizarra escuchando y viendo lo que dice y hace el profesor; que es una perfecta analogía del mito de la caverna en el que la clase es la caverna, la pizarra es la pared, las explicaciones son las sombras y las cadenas son el hecho de tener que estudiar para tener un trabajo y una vida cómoda.
Cristina Serrano - 1° Bachillerato A
ResponderEliminarViendo de lo que trata el mito de la caverna, podría considerar que por una parte tiene una gran similitud con la educación. Desde pequeños nos inculcan que lo más importante es estudiar para poder llegar a algo. Creo que todos alguna vez nos hemos sentido esclavos al ser alumnos y tener encima una gran carga de trabajo convirtiéndonos en esclavos del sistema educativo; pero también pienso que cuando creces y ya puedes tomar tu propia decisión (seguir estudiando o hacer otra cosa) las “cadenas” que llevábamos se nos van. Al estudiar bachillerato sigue habiendo un gran porcentaje de personas que se sienten esclavos, eligen seguir con los estudios debido a no saber qué hacer o no ver otras opciones; pero creo que la gran mayoría lo hacemos con un propósito. Relacionándolo con el mito de la caverna, pienso que el muro es lo que nos inculcan desde pequeños y la educación que solo se basa en memorizar. El exterior podría decir que es la finalidad por la que hemos elegido seguir por este camino.
Cristina Megina - 1º Bachillerato B
ResponderEliminarCreo que todos en algún momento de nuestra etapa como estudiantes nos hemos sentido esclavos del sistema educativo, ya sea porque debemos de cursar obligatoriamente hasta completar la educación secundaria o por pura presión social. Pues desde pequeños nos han repetido constantemente la importancia de tener estudios para poder ser alguien el día de mañana. Centrándonos más en bachillerato, muchos estudiantes se sienten esclavos (aunque estos estudios no sean obligatorios) porque saben que deben de esforzarse para poder entrar en la carrera que quieren. Esto supone lidiar con una gran presión. Otros muchos no tienen claro lo que quieren hacer una vez finalicen sus estudios, lo cual es muy frustrante. Al final sientes que te estás esforzando para cursar una carrera que no te atrae y acabar, en el mejor de los casos, en un puesto de trabajo que no te gusta. Realmente sientes que te esfuerzas por alcanzar el modo de vida que siempre nos han impuesto pero no el que a ti te gustaría tener. Por eso considero que las cadenas de estudiantes son principalmente la presión social.
Daniel Bermúdez 1º Bachillerato C
ResponderEliminar¿Los alumnos son esclavos?
Aunque existe cierto parecido con el mito de la caverna, creo que es una analogía incorrecta. Desgraciadamente es verdad que puede llegar a existir una presión social, familiar o personal. Pero todo esto es por un bien mayor, pues pienso que la educación es la mejor arma para obtener libertad, tanto individual como colectiva, además es demostrable que una población poco educada es mucho más manipulable. Simplemente tenemos que mirar al pasado o ciertos lugares de nuestro planeta para ver que esta afirmación es cierta.
Por lo tanto, aunque pueda existir una cierta similitud, es todo lo contrario.
La analogía entre la escuela y la caverna de Platón es interesante, ya que ambos lugares representan una forma de estar encerrados en un espacio limitado y condicionado por ciertas reglas y normas. Sin embargo, la educación no necesariamente tiene que ser vista como una prisión, sino como una oportunidad para desarrollar habilidades y conocimientos que permitan una mayor libertad y autonomía en el futuro.
ResponderEliminarEs cierto que puede haber presiones sociales o familiares que lleven a los estudiantes a estudiar bachillerato, pero también es importante tener en cuenta que la educación es una herramienta fundamental para poder elegir el camino que se quiere seguir en la vida. Es decir, aunque pueda haber ciertas limitaciones, como la elección de una carrera universitaria o el cumplimiento de ciertas obligaciones académicas, la educación nos da la capacidad de tomar decisiones informadas y conscientes.
Por otro lado, ser libre no significa necesariamente hacer lo que se quiere sin restricciones, sino tener la capacidad de elegir entre diferentes opciones y actuar de manera responsable y consciente. En este sentido, la educación puede ser vista como una forma de aumentar nuestra libertad al darnos las herramientas necesarias para comprender mejor el mundo y tomar decisiones informadas.
En conclusión, aunque la educación puede ser vista como una limitación en ciertos aspectos, también puede ser una fuente de liberación y empoderamiento si se entiende como una oportunidad para adquirir conocimientos y habilidades que permitan una mayor autonomía en el futuro.
Laura Cifuentes Heras 1ºBachillerato B
ResponderEliminarCreo que el sistema educativo se asemeja en algunos aspectos con la esclavitud,principalmente centrándome en los casos en los que los alumnos son obligados a asistir a clase en contra de su voluntad sin haber tenido en cuenta su opinión.
Si nos centramos en otros aspectos,también podemos ver que el sistema educativo actual se basa principalmente en las calificaciones de los exámenes en vez de tener en cuenta otros aspectos que desde mi punto de vista tienen la misma importancia y deberían tenerse mucho más en cuenta a la hora de evaluar a los alumnos como la realización de trabajos prácticos,la capacidad de expresar y razonar,la habilidad para transmitir ciertos conocimientos…
Por todo ello creo que se debería enfocar la educación de otra manera y cambiar el modo de enseñar,ya que aunque el mundo y la tecnología evolucionan rápidamente el sistema educativo lleva muchos años desactualizado.
En conclusión creo que los alumnos no son esclavos del sistema educativo pero sí que hay algunos aspectos que se deben modificar para que se perciba la educación como una manera de crecer como personas y no como una obligación.