Diferencia entre saber científico y no científico

Hemos intentado en algunas clases de 2º de bachillerato encontrar criterios de demarcación entre saberes científicos y saberes no científicos. En el curso de los debates se nombraron varios, pero mi sorpresa  apareció cuando varios alumnos, más de los que podía imaginar, dijeron que la astrología podía ser una ciencia...
Hoy, cuando algunas personas cuestionan la evidencia científica del cambio climático, por ejemplo, es necesario aclarar cuando un saber es científico y cuando no lo es. Teniendo claro que no todo saber tiene por qué cumplir los criterios de la ciencia para serlo, y que hay muchos supuestos saberes que se hacen pasar por científicos cuando no lo son, ¿en qué consiste su diferencia? ¿la astrología es una ciencia?
No olvides comenzar tu respuesta con nombre apellido y curso. 

Comentarios

  1. Sofía Pérez, 2º Bach B4 de abril de 2020, 20:10

    A mi parecer, existen diversos criterios para diferenciar entre los saberes científicos y los que no lo son, los cuales expongo a continuación.
    Para empezar, la distinción más importante se encuentra en que las ciencias estudian conceptos exactos, es decir, son como son, consisten en pruebas y son completamente objetivos, sin espacio para interpretaciones, y nosotros no podemos hacer nada para cambiarlos; mientras que en los saberes no objetivos caben siempre las opiniones e ideologías, son subjetivos, y podemos hacer que cambien.
    Además, los saberes no científicos los hemos creado nosotros como sociedad a lo largo de la historia, son producto del ser humano para satisfacer diversas necesidades o como producto de nuestra evolución. Siguiendo esta descripción, se podría catalogar como saberes no científicos la política, la historia, el periodismo, la lingüística...,ya que son producto del hombre y son subjetivos. Por el contrario, podemos afirmar que los saberes científicos continuarían existiendo independientemente de nuestra presencia, como es el caso de la física, la biología, la química o las matemáticas, es decir, nadie inventó los átomos ni las funciones matemáticas, y su existencia y características son objetivas.
    En otras palabras, existen pruebas y evidencias a favor de ciertos fenómenos científicos, que nosotros simplemente descubrimos y añadimos a nuestro saber, mientras que los saberes no científicos se crean y se estudian según la sociedad avanza.

    Esta distinción deja por lo tanto claro que la astrología, entendida como la relación entre los sucesos terrenales y la posición de las estrellas, es claramente un saber no científico que forma parte de una creencia y/o tradición, ya que ha sido en numerosas ocasiones comprobado que no existe validez científica que la avale. Por lo tanto, es subjetiva y se sostiene en las creencias y opiniones de las personas, además de haber sido creada por ellas para dar explicación a diversos sucesos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario.